Caminata a la Cima del Cerro del Mono
El paisaje de Vallarta · Nayarit está integrado por bellezas naturales extraordinarias. Probablemente, una de las características más emblemáticas de la región y que ha enamorado a visitantes provenientes de todas partes del mundo, es la combinación entre montaña y costa. Sin lugar a dudas, apreciar los bellos tonos azules del mar, acompañados por el verde resplandeciente de la selva, hace que la postal de ambos destinos tenga un encanto especial. Además, este atributo nos regala opciones de recreación más diversas en la bahía, puesto que un día podemos disfrutar de la playa y al siguiente aventurarnos en una excursión dentro de la jungla, que garantiza vistas panorámicas incomparables. Con esto en mente, te proponemos una actividad muy audaz para complementar tu experiencia vacacional una vez que hayas gozado del sol, la arena y el mar. Es preciso señalar que requiere buena condición física y estar abierto a caminar a través de veredas accidentadas y en pleno contacto con la vegetación.
El Cerro del Mono está ubicado al norte de la Bahía de Banderas, en las inmediaciones de la comunidad Higuera Blanca. Es una cumbre que, durante los últimos meses, ha ganado popularidad como ruta de senderismo entre residentes y visitantes de la región, especialmente de quienes se hospedan en el área de Punta de Mita y Sayulita. Se trata de una montaña de aproximadamente 350 metros de altura, desde donde se puede apreciar la belleza del Pacífico en todo su esplendor. Aunque existen operadores de tours con guías expertos para alcanzar la cima, el equipo editorial de Vallarta Lifestyles decidió realizar este recorrido por cuenta propia. Para nuestra sorpresa, en el trayecto nos encontramos con un buen número de excursionistas que de igual manera eligieron visitar el lugar sin asistencia, guiados por la señalización distribuida a lo largo del camino. Aunque la actividad resultó agotadora, la recompensa valió completamente el esfuerzo.
Punto de Partida
Desde Puerto Vallarta, la manera más conveniente de llegar al poblado de Higuera Blanca es en vehículo a través de la Carretera 200, dirección norte. Es necesario tomar la desviación hacia Punta de Mita y, poco antes de llegar a ese sitio, desviarse hacia Playa Litibu. Aproximadamente a 10 minutos de ese punto, se encuentra el acceso a Higuera Blanca, un pequeño pueblo al lado de la carretera.
Otra alternativa que puedes considerar para llegar a dicha localidad desde Puerto Vallarta son los autobuses de la compañía Autotransportes Medina (ruta Punta de Mita/Higuera Blanca) que salen de la parada ubicada sobre la avenida Francisco Medina Ascencio, a la altura de Walmart (frente a la Terminal Marítima).
Después de estacionar el vehículo, nos dirigimos a pie hacia la plaza principal de la comunidad, adornada con un quiosco y cerca de una tienda de conveniencia en donde adquirimos agua y frutas para recargar energías durante la caminata. Una vez que obtuvimos nuestras provisiones, iniciamos a caminar sobre la calle Juan Escutia (lateral a la plaza), una vía empedrada que despliega casas con la fisonomía típica del lugar. Poco después, comienza una brecha de terracería, sobre la que continuamos avanzando. A partir de este punto y a lo largo de la travesía, observamos flechas marcadas con el nombre “Cerro del Mono”, las cuales nos confirmaban que íbamos por buen camino.
Conforme avanzábamos, nos adentrábamos a un paisaje cada vez más irregular, rodeado por la vegetación característica de la selva baja caducifolia, con árboles como el papelillo, higuera, palma de coco de aceite y capomo. La atmósfera del sitio es muy especial y está acompañada por el sonido único de las aves.
Luego de caminar durante aproximadamente 10 minutos sin ver rastro alguno de edificaciones, salimos de la vereda y nos encontramos con una calle pavimentada. Aquí giramos hacia la derecha, siguiendo la ruta marcada por una señal. Este tramo resultó muy especial, pues la vía está rodeada por higueras muy altas, que proporcionan sombra y un paisaje muy bello. Poco después, nos topamos con una cerca de madera, misma que estaba abierta. Una flecha indicaba que debíamos entrar por ahí para comenzar a subir la cuesta del Cerro del Mono. En efecto, en este lugar comienza la pendiente, por lo que el esfuerzo físico se comenzó a intensificar paso a paso.
El Cerro del Mono
Aunque existen varias teorías con respecto al origen del nombre del Cerro del Mono, de acuerdo con los habitantes de Higuera Blanca, recibió esta denominación debido a que tiempo atrás se encontraron varios tótems en forma de primates en los alrededores de este lugar. Se presume que los objetos pertenecían a las tribus que habitaron en la región tiempo atrás. Otra versión afirma que anteriormente había monos que habitaban el área. Sin embargo, ninguna de estas historias ha sido documentada u oficializada.
Vista de 360 Grados
Desde la cerca de madera hasta la cima del Cerro del Mono, se realiza un trayecto de aproximadamente 40 minutos a paso tranquilo. En algunos puntos, se alcanzan parajes desde los que se pueden apreciar vistas hacia el océano. En estos sitios, puedes tomar un descanso, hidratarte o comer un snack ligero.
Aunque, en general, el sendero está muy bien definido y señalizado, el terreno se vuelve muy rocoso una vez que la cumbre está próxima, por lo que sugerimos tener precaución al apoyarse o subir por las piedras. Afortunadamente, en ningún momento es necesario escalar o trepar, por lo que solo basta tener un poco de cuidado para lograr el objetivo y llegar a la cúspide.
El punto más alto del Cerro del Mono consiste en una especie de mirador con vista de 360 grados. Es un espacio amplio, de superficie irregular, en donde hay muchas rocas sobre las que los excursionistas pueden sentarse a admirar el horizonte, así como árboles que proveen sombra. Además, el viento corre libre y abraza a cada uno de los aventureros que aprecian el paisaje.
Desde arriba, se puede contemplar el verdor y la belleza de la parte norte de la Bahía de Banderas, la majestuosidad de la península sobre la que se sitúa Punta Mita, las Islas Marietas, Playa Litibu, Sayulita y algunas playas vírgenes que se mantienen escondidas por su ubicación geográfica. Asimismo, se pueden observar a las embarcaciones que navegan las aguas de Riviera Nayarit, el vaivén de las olas y las corrientes marinas. Se trata de un sitio que roba el aliento a cualquiera, provee una sensación de grandeza y en donde querrás pasar el mayor tiempo posible. El punto más elevado de este mirador está conformado por una roca de grandes dimensiones, sobre la que los visitantes se toman fotografías grupales y selfies en todas direcciones.
Cuesta Abajo
Luego de disfrutar durante casi una hora de la vista panorámica desde el Cerro del Mono, el equipo editorial de Vallarta Lifestyles emprendió el recorrido de regreso hacia Higuera Blanca. Siguiendo la misma ruta, hicimos aproximadamente una hora y 15 minutos hasta la plaza del poblado. Satisfechos con la excursión, decidimos continuar el día en Punta de Mita, en donde tomamos el almuerzo y descansamos después de una larga caminata.
Si realizas esta aventura por la mañana, puedes aprovechar la cercanía de playas como Sayulita y Litibu para pasar la tarde y descansar en la tranquilidad de la costa. Relajarte y ver el atardecer en la playa será la mejor manera de culminar un día muy dinámico.
Recomendaciones:
· Ropa y calzado cómodo
· Cargar un cambio de ropa extra
· Llevar suficiente agua
· Repelente de mosquitos
· Ir durante el día y de preferencia acompañado
Tours y Excursiones con Guías:
· On Live
Recorridos grupales y privados
· Vista Paraíso
· Wildmex
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