Durante el invierno, cuando Puerto Vallarta mantiene su clima templado frente al Pacífico, basta con internarse hacia la sierra jalisciense para descubrir un contraste encantador: aire fresco, paisajes boscosos y pueblos donde las tradiciones decembrinas se viven de manera distinta. A pocas horas por carretera, cinco Pueblos Mágicos ofrecen la escapada perfecta para disfrutar del frío suave, la naturaleza y el espíritu festivo que distingue a Jalisco.

SAN SEBASTIÁN DEL OESTE

San Sebastián del Oeste invita a vivir el invierno con calma y autenticidad. A poco más de una hora de Puerto Vallarta, este Pueblo Mágico conserva intacta su esencia minera, con calles empedradas, casonas históricas y un ambiente que parece detenido en el tiempo. Durante la temporada invernal, el clima fresco y la neblina matinal envuelven el pueblo en una atmósfera íntima, ideal para disfrutar de caminatas tranquilas, café de altura recién tostado y visitas a pequeñas fondas donde los sabores tradicionales reconfortan.

MASCOTA

A poco más de dos horas al sureste de Puerto Vallarta, Mascota ofrece una experiencia auténtica que combina patrimonio histórico, gastronomía típica y naturaleza. En temporada invernal, el clima fresco invita a recorrer las calles del centro, disfrutar de posadas locales y degustar dulces tradicionales. Para quienes buscan contacto con el entorno natural, la Presa Corrinchis y el Volcán El Molcajete brindan vistas espectaculares y paseos tranquilos, perfectos para conectar con la calma que caracteriza a este Pueblo Mágico.

TALPA DE ALLENDE

Ubicado entre las montañas de la Sierra Madre Occidental, Talpa de Allende es un pueblito reconfortante, donde sus calles empedradas y la Basílica de Nuestra Señora del Rosario de Talpa (uno de los centros de peregrinación más importantes del occidente del país) adquieren un ambiente sereno y tradicional. Muy cerca del pueblo se encuentra el Bosque de Maple, un escenario natural único en México que, aunque alcanza su mayor esplendor en otoño, conserva en invierno una atmósfera silenciosa y contemplativa, ideal para caminatas entre árboles y paisajes montañosos.

MAZAMITLA

Un poco más alejado, pero ideal para una escapada invernal prolongada, Mazamitla es famoso por su entorno alpino y clima frío durante esta época del año. Rodeado de densos bosques, este Pueblo Mágico ofrece acogedoras cabañas, plazas animadas y una fuerte tradición comunitaria. En invierno, las posadas, el ponche caliente y la gastronomía local (como el tradicional Caldo de Bote (un caldo de pulque con tres carnes y verduras) crean una atmósfera cálida y familiar que contrasta con el aire frío de la montaña.

TAPALPA

Tapalpa es sinónimo de descanso entre montañas. Su arquitectura tradicional, rodeada de extensos bosques de pino y encino, la convierte en una de las escapadas favoritas durante el invierno. Aquí, las cabañas con chimenea y las fogatas nocturnas marcan el ritmo de la temporada. Además de su oferta natural, Tapalpa destaca por su agenda cultural y gastronómica, con eventos que llenan de vida sus calles empedradas.

Estos cinco Pueblos Mágicos, cercanos a Puerto Vallarta, demuestran que Jalisco tiene múltiples formas de vivirse durante el invierno. Desde la costa hasta la sierra, el estado ofrece experiencias que combinan naturaleza, tradición y descanso, ideales para quienes buscan celebrar la temporada decembrina bajo un clima fresco y escenarios llenos de encanto.